Cada vez más a menudo y sin que nadie me oiga, me pregunto a mí misma si mi cerebro está involucionando.
Vamos, que si lo tengo atrofiado.
Mejor dicho, que si lo estoy atrofiando.
Con lo que él y yo hemos sido. Poder estar hasta 10 horas estudiando: mi cuerpo sentado y mi cerebro cavilando. Pegarme 5 horas haciendo un exámen. Me dan escalofrescos. Ahora me cuesta a veces hasta concentrarme en algo denso que estoy leyendo.
Ayer sin ir más lejos, me pegué media hora para sacar una ecuación de tercer grado. Eso que algún día supe hacer. Con la consecuente ofuscación y frustración. Por mis ovarios que la saqué, pero me da mucha pena que mi naturaleza vaga haga que sin darme cuenta o mejor dicho sin prestar demasiada atención, mi materia gris cada vez sea más negra.
Como si de un músculo sin usar se tratase, mis conexiones neuronales bien se podrían componer ahora de coca-cola y no me daría ni cuenta. ¿Lo estoy volviendo tonto?
Es una autocrítica.
Esta vez escrita.
Probablemente mañana se me habrá pasado.
Hasta que me llegue un derivada.
¿Qué pasará con una integral?
Y así sucesivamente.
Igual tienes que darle un descanso porque la involución puede ser por un uso excesivo (abuso). He encontrado tu blog, como casi todos lo que me gustan, en el de Anita e Ishtar, así que muy buenas referencias. Saludos.
ResponderEliminarMe temo que en este caso hace demasiado tiempo que tengo el cerebro ocioso. Bienvenida, a mí también me encantan sus blogs.
EliminarSaludos
Tu sabes como yo que el cerebro llega a su máximo desarrollo sobre los ventipocos años, a partir de ahí, las neuronas comienza a joderse, o lo que es lo mismo, que cada vez nos volvemos un poco más gilipollas. Mi nivel de eso que he dicho, está bastante alto.
ResponderEliminarUn abrazo.
Ahhhhhh, ahora ya entiendo muchas cosas de los mayores ;)
EliminarSaludines.
Te entiendo, a mí también me pasa. Y tengo miedo de ponerme a repasar lógica, que hace 6 años que no la toco. Creo que voy a morir en el intento, si no de agotamiento, por tirarme por la ventana en un ataque de nervios XD
ResponderEliminarMua!
Lo lógico sería que la lógica no se olvidase, ¿no? (jajaja es coña, no tengo ni zorra idea de lógica)
EliminarEs impresionante como se acostumbra todo a la buena vida, entendiendo por buena vida forzarlo al mínimo, en plan: ¿Qué tenía que comprar hoy? ;)
Creo que eso nos pasa a todos. Ecuación de tercer grado?? vamos, ni lo intento!
ResponderEliminarPero según vamos desaprendiendo unas cosas, aprendemos otra, eso es la vida.
Muaks
Si, la verdad que el saber hacer una ecuación de tercer grado no me va a solucionar gran cosa en la vida, como la picaresca de la que tampoco es que vaya sobrada. Pero no sé, es la sensación de estar llevándolo por "el mal camino"
EliminarBesicos.
No seas tan dura contigo misma, el sentido de las cosas yace, no en las cosas, sino en nuestra actitud hacia ellas.
ResponderEliminarDe eso me quejo, de mi actitud, y de lo poco que me dura el autocastigo.
EliminarYo también lo pienso mucho. Me consuelo diciendome que lo q se pierde neuronalmente se gana por experiencia y el bagaje que da vivir.
ResponderEliminarBesos
Pero...y si juntasemos las dos cosas sería la bomba, ¿no? Puestos a pedir...
EliminarBesos!